El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos (ICE) ha recibido una respuesta masiva a su reciente campaña de reclutamiento. El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) ha anunciado que más de 100,000 "estadounidenses patriotas" han solicitado unirse a la agencia para ayudar a "eliminar asesinos, pandilleros, pedófilos y terroristas de los Estados Unidos".
La secretaria del DHS, Kristi Noem, hizo un llamado a los ciudadanos para que sirvan en ICE, destacando la necesidad de hombres y mujeres dedicados para "sacar a los peores criminales de nuestro país", en un esfuerzo por corregir las supuestas "políticas fallidas" de la administración anterior.
Esta campaña de reclutamiento masivo, impulsada por la administración del presidente Trump, forma parte de un plan para expandir la fuerza laboral de ICE con 10,000 nuevos oficiales.
Sin embargo, esta iniciativa no ha estado exenta de críticas. Algunos líderes locales de las fuerzas del orden han expresado su objeción a los correos electrónicos que ICE ha enviado a los oficiales que trabajan en agencias asociadas a través del programa 287(g), que permite a los agentes locales hacer cumplir las leyes federales de inmigración. Estos correos, según reportes, animan a los agentes a dejar sus puestos actuales para unirse a ICE, lo que ha generado preocupación entre los líderes locales.
A pesar de las críticas, la administración del presidente Trump parece decidida a seguir adelante con su plan de reforzar la fuerza de ICE. Los puestos disponibles incluyen oficiales de deportación, investigadores criminales y abogados, en una movida que redefine la estrategia de cumplimiento de la ley de inmigración en el país.
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